Posts Tagged ‘Universidad de la República’

Donación de sangre en la explanada


EL 20 DE ABRIL

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El próximo 20 de abril se va a realizar una jornada de donación de sangre en la explanada de la Intendencia de Montevideo, dirigida a médicos y público general.

La Cátedra de Hemoterapia, de la Universidad de la República, planea implementar este año un proyecto integral para lograr la autosuficiencia del servicio.

En charla con Ser Médico, la Dra. Jimena González, asistente de la Cátedra y coordinadora del proyecto, señaló que “se están esperando autorizaciones para iniciar el proyecto dentro de la Universidad”.

En tanto, el próximo 20 de abril se va a realizar una jornada extramuros en la esplanada de la Intendencia, en la que se invita especialmente a los médicos a “dar el ejemplo”, señaló la Dra. González.

http://www.republica.com.uy/donacion-de-sangre-3/511954/

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Liceos: bajó la repetición en 2013


MEC DIFUNDIÓ ANUARIO ESTADÍSTICO SOBRE EDUCACIÓN

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El Ministerio de Educación y Cultura presentó la edición 2013 del Anuario Estadístico de Educación, que muestra que en Secundaria bajó levemente la repetición entre 2012 y 2013, pasando de 28,6% a 27,9% del total de estudiantes.

La presentación fue hecha por el ministro de Educación, Ricardo Ehrlich, el director de Educación, Luis Garibaldi, y Gabriel Errandonea, coordinador del área de investigación y estadística del Ministerio de Educación.

Al comentar los resultados, Garibaldi aseguró que «nadie nos podrá decir que no damos la información, somos transparentes; después, si está bien o está mal es parte del debate político».

El Anuario Estadístico describe que en Secundaria en el largo plazo la repetición ha mostrado una tendencia a crecer 0,9% por año. Sin embargo en los dos últimos años ha bajado.

Entre 2011 y 2012 bajó la repetición en todas las orientaciones de Secundaria. En 2013 siguió bajando y se retornó a los niveles de 2011, que eran de 41,5%, señala el estudio.

En lo que tiene que ver con la formación docente, en el año 2012 se obtuvo el registro de matrícula más alto desde el 2000. En 2013 se incorporaron otros 1.736 estudiantes a los ámbitos de formación docente, informa el Anuario.

Universidad. 

En cuanto a la educación terciaria, se señala que más de 8 de cada 10 universitarios cursan en la Universidad de la República (UdelaR), y que desde el año 2011 el ingreso de estudiantes creció en la universidad pública y decreció en las instituciones privadas.

Asimismo, se informa en el estudio que el número de estudiantes que se recibió en 2013 bajó 2,7% respecto al año anterior.

Otro capítulo es el relativo a la marcha del Plan Ceibal, uno de los objetivos más ambiciosos del sistema. Según el Anuario, el Plan Ceibal está desplegado en 2.556 centros educativos en todo el país, y alcanza a 559.836 alumnos y a 47.623 docentes.

http://www.elpais.com.uy/informacion/liceos-repeticion-secundaria.html

Hospital de Clínicas incorpora impresiones 3D en las cirugías


VIOLENCIA, TRÁNSITO Y DEPORTE PROVOCAN SEVERAS FRACTURAS

La impresión 3D arribó a los hospitales públicos. Cada 15 días, cirujanos plásticos del Hospital de Clínicas utilizan esta tecnología para agilizar operaciones de personas que sufren fracturas de mandíbula.

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La tomografía es fundamental para imprimir. Foto: Francisco Flores

Antes, las principales causas que ocasionaban este tipo de fracturas eran solo los siniestros de tránsito. Desde hace unos años, se sumó la violencia interpersonal y, en tercer puesto, aparecieron los accidentes deportivos.

Hasta hace dos meses, cuando sucedía este tipo de incidente, hacían una tomografía y operaban. Ahora, la Cátedra de cirugía plástica, reparadora y estética de la Universidad de la República empezó a innovar en la posibilidad de sumar un nuevo eslabón en su proceso quirúrgico: la impresora 3D.

Como veían que en el mundo de la salud la presencia de esta tecnología empezaba a expandirse, los cirujanos se vieron seducidos por la posibilidad de incorporarla. Hace dos meses decidieron realizar la primera operación en un paciente de 50 años que sufrió un accidente de tránsito y tuvo múltiples fracturas en la mandíbula.

«Ahorró tiempo, simplificó el proceso anestésico quirúrgico y nos facilitó el encuadre académico», explicó a El País Héctor Juri, profesor titular de la cátedra.

El proceso.

Cuando un paciente se fractura, se le hace una tomografía. El encargado de realizarla es el técnico radiólogo, a quien le solicitan producirla «en alta resolución». Esa tomografía la guardan en un CD y la llevan a los expertos en impresión 3D.

Allí, convierten el archivo para que la impresora lo reconozca y empiezan a imprimir a escala real la mandíbula fracturada. El proceso de fabricación demora unas seis horas. «En un día ya tenés la pieza», contó Óscar Jacobo, profesor agregado de la cátedra.

La mandíbula impresa tiene la rajadura de la fractura. Una vez en la mano de los médicos, la dividen en dos y la «regeneran». Luego, eligen la placa de titanio, un objeto que sirve para colocar tornillos y unir las dos partes quebradas. También permite seleccionar la profundidad del tornillo que los cirujanos elegirán, en función del paciente. «En una tomografía es muy difícil medir la profundidad», indicó Jacobo. Algunas de estas decisiones se toman durante la operación. Por ello, recrearla antes, ahorra un 25% del tiempo quirúrgico, según estimaron los cirujanos.

¿Más barato?

Las recreaciones maxilofaciales no son nuevas para estos médicos. En operaciones que eran muy complejas, enviaban la tomografía computada a Brasil y la imprimían en estereolitografía, un material muy costoso. Esa impresión costaba unos US$ 1.000 dólares.

Ahora, con un convenio que lograron con tres emprendedores especialistas en impresión 3D, cada mandíbula recreada les cuesta unos US$ 50. Además, con menos tiempo en cirugía presumen que «permitirá abaratar costos al sistema sanitario», apuntó Gustavo Mantrana, residente de posgrado de la cátedra.

El material que utiliza la impresora es PLA, hecho a partir de maíz. Es biodegradable y en Uruguay se consigue a US$ 50 el kilo. «Tiene una ventaja a largo plazo: no genera un efecto nocivo para el medioambiente», comentó Juri.

El costo de cada pieza corre a cuenta de la cátedra como parte de la investigación que llevan a cabo los docentes.

Esta nueva técnica no solo tiene efectos para el paciente. También repercute desde el punto de vista académico. «Con esta metodología podemos saber las destrezas manuales de los residentes y cómo resuelven problemas quirúrgicos de mediana o alta complejidad», explicó Juri.

Hecho y por hacer.

La impresión 3D tiene una aplicación «para todo lo que puedas imaginar», aseguró Alejandro Lozdziejski, emprendedor en esta área. La medicina es una de ellas.

La Facultad de Odontología de la Universidad de la República sumó esta tecnología a su posgrado de Implantología desde el año pasado. De ese modo, algunos de los 450 implantes que realiza la facultad se utilizan con esta técnica.

Según los cirujanos, esta misma técnica puede utilizarse para fracturas de manos y en otro tipo de cirugías en otras partes del cuerpo.

«Seguiremos desarrollando trabajos de investigación científica en este tema para lograr cada vez cosas mayores», concluyó Mantrana.

USOS 3D EN MEDICINA

Prótesis para impresión 3D

En el mundo ya se han impreso piernas plásticas, orejas postizas, cubiertas para la cara. Bespoke Innovations es una empresa que se dedica a este negocio. Uno de estos revestimientos cuesta entre US$ 4.000 y US$ 6.000.

La tráquea artificial

En Estados Unidos, Kaiba Gionfriddo, un niño de un año y medio, logró sobrevivir gracias a la impresión 3D de una tráquea. La operación fue en el Hospital Mott en el 2012. Hoy, el niño respira sin inconvenientes.

Cráneo de plástico

Médicos del Hospital Universitario de Utrecht, en Holanda, implantaron todo el cráneo (de plástico) desde la frente hasta la nuca y “de una oreja a la otra” de una persona. La operación ocurrió el pasado 27 de marzo. Supuso “20 horas de operación”, explicaron los expertos tras finalizarla.

Creación de tejidos

Organovo comercializó una bioimpresora en 3D, capaz de reproducir tejidos humanos, informó el diario El País de Madrid. Ha sido utilizada para generar tejido hepático, entre otros usos.

Células madre

La Universidad de Heriot-Watt de Edimburgo anunció el uso de células madre embrionarias humanas por vez primera en una impresión 3D. Según contaron sus investigadores, lograron mantener las características naturales.

http://www.elpais.com.uy/informacion/hospital-clinicas-incorpora-impresiones-3d.html

Paciente oncológico gana juicio y el MSP pagará tratamiento


FÁRMACO. DOSIS MENSUAL CUESTA $ 536 MIL

El MSP fue condenado a financiar el tratamiento oncológico a un paciente de 57 años con un fármaco de alto costo. El caso fue patrocinado por estudiantes de abogacía que desde 2013 llevan ganados 12 reclamos judiciales por ese medicamento.

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MSP y F.N.R enfrentan reclamos judiciales por medicamento.Foto: Archivo El País.

El juez de lo contencioso administrativo Alejandro Martínez hizo lugar a una acción de amparo presentada por un paciente oncológico de Tacuarembó y condenó ayer al Ministerio de Salud Pública (MSP) a financiar su tratamiento con el fármaco Cetuximab, cuya dosis mensual cuesta $ 536 mil.

El paciente, de 57 años de edad, padece cáncer de colon con metástasis en el hígado. Debido al avance de la enfermedad el médico tratante le dio una expectativa de vida de un mes. Sin embargo, con el nuevo tratamiento el hombre tendrá chances de tener una sobrevida de seis meses a dos años, dijo el abogado Juan Ceretta, responsable del Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República que brindó asesoramiento jurídico al paciente a través del trabajo honorario de seis estudiantes del sexto y último año de la carrera de abogacía.

«Realmente causa mucho fastidio que los pacientes tengan que hacer amparos judiciales reclamando el Cetuximab, que es un fármaco cuya eficacia no se discute y está muy claro en qué casos funciona y en qué casos no», explicó Ceretta ayer en diálogo con El País.

El Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República comenzó a brindar asesoramiento en acciones de amparo por medicamentos el año pasado, y desde entonces lleva planteados 18 juicios —los cuales ganó— y 12 de ellos fueron por Cetuximab, dijo Ceretta.

El fármaco no está incluido en el Formulario Terapéutico Médico (FTM) y por esa razón no se brinda en las mutualistas ni en Salud Pública.

El Cetuximab se utiliza sobre todo para tratar el cáncer de colon y, en especial, en casos donde la enfermedad hizo metástasis hepática. Antes de prescribirlo, los médicos analizan la situación del paciente, quien debe reunir ciertas características en las que ya está probada su eficacia, destacó el abogado.

Uruguay tiene una alta tasa de prevalencia de cáncer de colon, ya que según datos del Instituto Nacional del Cáncer, cada año se diagnostican 1.550 pacientes, lo que equivale a más de cuatro por día.

Además, la tasa de mortalidad por cáncer colo-rectal sigue siendo muy alta en Uruguay: 6 de cada 10 pacientes llegan a la primera consulta médica con una lesión maligna de gran tamaño. Por eso las autoridades recomiendan la realización de evaluaciones preventivas que permiten detectar precozmente la enfermedad.

http://www.elpais.com.uy/informacion/paciente-oncologico-gana-juicio-estatal.html

A Uruguay «le duele México»


ACTO EN PARANINFO DE UDELAR

El Paraninfo de la Universidad de la República (UdelaR) se vistió de luto. Cientos de estudiantes, dirigentes políticos y ciudadanos comunes se hicieron presente en el edificio central de la UdelaR para repudiar la desaparición de los 43 estudiantes normalistas en México. El rector de la casa de estudios, Roberto Markarián, el canciller Luis Almagro y una vocera de los estudiantes de magisterio, hicieron uso de la palabra en un emotivo acto.

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Por Guillermo Bueno, de Espectador.com

Sobre las 19:40 horas comenzó la oratoria. Un moderador le dio la palabra al rector Roberto Markarián, quien fue recibido con un aplauso por parte del público que colmó todos los asientos y escaleras disponibles del Paraninfo.

Los oradores se ubicaron sobre la derecha del salón, dejando en el medio 43 sillas con fotos y nombre de cada uno de los estudiantes mexicanos. Al fondo de esos asientos se proyectaba una imagen de un ojo, con una lágrima con los colores de la bandera azteca y la frase «me dueles México».

Markarián fue la voz por la casa de estudios, donde están consustanciados con el lamentable suceso ocurrido en México.

Cada palabra del orador fue escuchada con un respetuoso silencio. Cada finalización de oratoria fue acompañada de un cerrado aplauso, cada vez más creciente.

Los ministros Ricardo Ehrlich, Daniel Olesker, Eduardo Brenta, José Bayardi, Roberto Kreimerman y Mario Bergara estaban entre los presentes, además del exdirigente del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros Jorge Zabalza.

Luego llegó el turno del canciller, Luis Almagro, quien se expresó en la misma forma que lo hizo el Ministerio de Relaciones Exteriores este lunes, repudiando profundamente la desaparición de los 43 estudiantes, reclamando la aparición de los mismos y expresando «su más profunda solidaridad con los familiares y amigos de las víctimas, y con el conjunto de la sociedad mexicana».

«Toda nuestra fuerza tiene que ser para luchar contra estas injusticias y por la dignidad humana» sentenció Almagro, frase que terminó acompañada de un cerrado aplauso por parte de los presentes.

La última oradora fue una vocera representante de los estudiantes de Magisterio, la misma carrera que estudiaban los jóvenes desaparecidos.

Este discurso tuvo un elemento emotivo al final, cuando la disertante, tras pedir «que aparezcan los normalistas», un grupo de estudiantes mexicanos que se encontraban en el Paraninfo, comenzó a gritar «fue el Estado, fue el Estado», culpando al Estado mexicano como responsable de su desaparición. Los presentes apoyaron sus palabras con un aplauso que se prolongó por varios minutos.

Finalmente, la organización proyectó un video de Mario Benedetti que habla sobre los desaparecidos, realizado para los de nuestro país, pero perfectamente aplicable para este lamentable hecho que sucede en México.

Este fue el punto final de un evento breve, pero cargado de emoción.

Con este acto, queda más que en claro que a Uruguay «le duele México».

http://www.espectador.com/sociedad/303590/a-uruguay-le-duele-mexico

Conozca Jet-SIS, el sistema uruguayo que quita la niebla


CIENCIA Y TECNOLOGÍA

RAFAEL GUARGA

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En Perspectiva entrevistó al exrector de la Universidad de la República e ingeniero Rafael Guarga, quien desarrolló un sistema llamado SIS, el cual se usa para combatir las heladas en las plantaciones más delicadas y que, recientemente, tuvo otro uso: se utilizará para eliminar la niebla en la carretera. Guarga explicó que “la ecuación económica y el hecho de que se trata de una alternativa amigable con el ambiente” hace que este producto innovador tenga una demanda mayor en un futuro cercano.

Los padres de los alumnos de la escuela rural N° 18, en el departamento de San José, tienen una preocupación menos. Desde el mes pasado sus hijos van a estudiar sin el riesgo de tener que cruzar la peligrosa ruta 3 bajo la niebla.

En ese lugar se instaló una estación experimental que emplea la tecnología SIS, creada por el ingeniero uruguayo Rafael Guarga, y que fue desarrollada originalmente para combatir las heladas en plantaciones de cítricos y en viñedos.

Para conocer más sobre este sistema que está instalado en Uruguay y en varios países del mundo, En Perspectiva conversó con el creador de esta tecnología, centrándose en su nuevo uso: la seguridad vial.

Como disparador, Guarga comenzó explicando cómo funciona el sistema, originalmente creado para evitar la caída de helada: “Esta es la cuarta generación relacionada al control de las heladas”.

“Pensando en la historia de los instrumentos usados para el control de las heladas, la primera generación nos remonta al fuego, luego viene el agua y mas adelante, con el desarrollo de la tecnología, se comienza a usar motores de aviación sobre los campos, un sistema más efectivo pero más caro y ruidos”.

Estos tres sistemas “se han venido aplicando y son posibles de poner en funcionamiento con sus pro y sus contras”, pero “surgió esta alternativa que fue creada en Uruguay, un país que no es famoso por este tipo de inventos y desarrollo”.

El SIS “se usa en la protección de cítricos y algunos plantíos que son delicados”, agregó Guarga, quien lo definió como “una especie de aspiradora que se lleva las capas más bajas del aire y las lanza hacia arriba. Al eliminar esas capas más frías evita la acumulación y el frío extremo no afecta a las plantaciones”.

Niebla

En referencia al Jet-SIS y su funcionamiento, Guarga explicó que se trata de un tubo “con ventiladores que trabajan en relación a la zona protegida, de unos 200 metroscon unos 30 metros de ancho”.

Allí en plena ruta tres, “los aparatos sacan toda la niebla impidiendo que se desarrolle de nuevo durante el momento en que se produce el fenómeno y por otro lado se impide que la niebla formada ingrese a la zona”.

El Jet-SIS “funciona con energía eléctrica y su manejo es manual, aún no está automatizado” porque “queremos aprender sobre el desempeño del sistema y en paralelo ir capacitando operarios”.

En total el sistema “tuvo un costo de 100 mil dólares, una inversión menor a la que hubiera tenido hacer un puente, sin contar con los peligros de esas estructuras”, dijo y sentenció:“La ecuación económica y el hecho de que se trata de una alternativa amigable con el ambiente” hace que este producto innovador vaya a tener una demanda mayor en un futuro cercano.

La transcripción de esta entrevista estará disponible aquí

http://www.espectador.com/tecnologia/303135/conozca-jet-sis-el-sistema-uruguayo-que-quita-la-niebla

En la universidad pese a todo


Jóvenes estudian para ser profesionales, aunque su condición física o mental sea un obstáculo.

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Matías Verdugo no reclama preferencia, sino igualdad. Foto: Francisco Flores.

Son trece escalones. Los conoce a la perfección. Los tiene que contar, uno por uno, cada vez que entra o sale de la Facultad de Psicología, donde cursa el último año de carrera. Con la ayuda de su bastón subey sortea los mil y un obstáculos que pueda haber en el pasillo, el baño o el salón de clases. El viernes anterior, ni bien contó el escalón trece, se pegó con un cartel. Era una pizarra apoyada contra la pared que invitaba a los estudiantes a la Marcha de la Diversidad. Y Mauro Sghezzi (25), quien hace diez años dejó de ver, no pudo evitarla.

Un problema de nacimiento hizo que lentamente fuera perdiendo la visión hasta que, cuando cumplió 15, la oscuridad fuera completa. Sin embargo, él es uno de los 1.123 alumnos de la Universidad de la República (Udelar) que, a pesar de tener alguna discapacidad física, estudia a nivel terciario. Son 1,3% del total.

En su morral lleva a la facultad de la Udelar un grabador con el que repasa las clases y, de vez en cuando, su computadora portátil donde saca apuntes. Gracias a Jaws, un programa informático, escucha dónde está ubicado el cursor para ir manejando el equipo. Otro software (FineReader) reconoce los caracteres y se los lee. Por eso baja los textos de Internet o digitaliza alguna fotocopia cuando es difícil acceder a ese material en la Red. Al menos es lo que hacía hasta el año pasado porque, por la polémica con las fotocopiadoras cercanas a la Facultad de Derecho, cerró el local al que enviaba los libros. Hay veces, incluso, que su padre lo ayuda a entender qué dice un contenido que no le quedó claro.

«En los primeros tiempos de facultad era muy común encontrar obstáculos en el camino», recuerda Mauro. Tachos de basura en la mitad del pasillo, carteles colgados del techo que llegaban a la altura de la cabeza y la falta de un ascensor para acceder al último piso en donde tiene las clases teóricas hacían necesaria la ayuda de algún compañero solidario para llegar sano y salvo a destino. Pero la realidad, dice, cambió.

Hubo reformas edilicias y ahora la biblioteca cuenta con una computadora que tiene instalado el programa especial para poder dar los exámenes, si es que algún profesor no le permite traer la suya personal. Por eso, dos o tres semanas antes de cada prueba, Mauro procura hablar con el docente y solicita el acceso al equipo.

«Una vez», cuenta, «la profesora se olvidó de solicitar la computadora y, previendo que eso pudiera ocurrir, traje la mía. Al llegar al salón constaté que, efectivamente, no estaba el equipo y la docente sorprendida dijo: No hay lugar para apoyar la PC, ¿cómo hacemos?. Mi padre, que justo me acompañó ese día hasta llegar a la clase, sacó la campera de la docente de una silla y dijo: Ahora sí hay lugar. Lo que falta, a veces, es voluntad». 

Aunque no los conoce, Mauro tiene mucho en común con Rodrigo, Matías y Gonzalo. Los cuatro son jóvenes, talentosos, con futuro y que están estudiando para ser profesionales. Sin embargo, también los une el hecho de que se enfrentan al sistema educativo en desigualdad de condiciones con respecto a la mayoría: Mauro con su ceguera, Rodrigo y la sordera, Gonzalo tiene Síndrome de Asperger y Matías sufre paraplejia. A pesar de eso, ellos, como otros uruguayos, asisten todos los días a sus respectivas facultades, estudian en grupos de compañeros, rinden los exámenes y aspiran a títulos como cualquier estudiante más. Con más esfuerzo.

El coraje, sumado al respaldo familiar, le permitió a Mauro llegar hasta este nivel educativo y trabajar como administrativo en el Banco de Previsión Social, donde quiere ejercer la psicología una vez obtenido el título. Y por supuesto que el camino no le es fácil. De hecho, Mauro era un brillante alumno de Matemática, de esos que sacan las mejores calificaciones. Era capaz de pensar mentalmente los problemas que un profesor le planteaba y, en segundos, resolvía la consigna. Así fue hasta que llegó al Bachillerato Científico. Un profesor de Física no supo describirle unas gráficas, le dijo que sin mirar era imposible comprenderlas y que no entendía por qué seguía estudiando. Lejos de desanimarse empezó Humanístico y cuando el problema volvió a presentarse con algunas proyecciones, optó por sexto de Derecho. Y de ahí, a su actual carrera.

El mismo temple de acero tuvo cuando algún compañero de liceo lo hostigaba, no tanto por su ceguera sino por su rendimiento académico. Distinta es la vivencia en facultad. Al poco tiempo de haber empezado los cursos se le acercó Tania, una compañera, y lo invitó a formar un grupo de estudio. Ese equipo creció y hoy son catorce amigos que comparten desde casamientos hasta horas enteras repasando: unos leen en voz alta y Mauro aporta su conocimiento.

Es que Mauro se concentra tanto en la tarea que, por momentos, se olvida de que es ciego. «Como durante un tiempo de mi vida pude ver, me imagino las imágenes o armo mis propias interpretaciones de cómo son las personas que me rodean», dice sentado en el patio de la universidad.

¿Cómo hacés con la información visual que te perdés de una paciente?

Me puedo perder datos visuales, pero los obtengo de otra forma. Uno puede notar los nervios no solo en los movimientos, también en el habla, en los silencios. O, indirectamente puedo pedirle al paciente que se describa.

Lo que parece complejo, Mauro lo resuelve con esa sencillez. Y es así que entiende a la universidad como «un maravilloso ámbito para crecer, superarse y ser quien uno quiere ser».

ANIMADO. Rodrigo Couto (24) es un extranjero en su propia tierra. Es uruguayo, pero su sordera absoluta de nacimiento producto del Síndrome de Usher que padecen 3,5 personas cada 100 mil en el mundo hace que su idioma oficial sea el lenguaje de señas y que necesite de un intérprete para entender, a la perfección, lo que un profesor explica en la universidad. Aun así le quedan solo cinco materias para recibirse de licenciado en animación y videojuegos.

Parece paradójico, pero no lo es. Rodrigo es un fanático de la informática y el diseño desde los 14 años. Por eso, cuando notó que quería estudiar una carrera vinculada a la animación 3D en la Universidad ORT, consultó al coordinador si era viable cursar y luego ejercer la profesión en un área en la que el sonido es una pieza fundamental. Y la respuesta fue: «Se trata de un trabajo en equipo y un compañero oyente puede resolver los aspectos de sonido».

De hecho, hace un año Rodrigo publicó un video inaudible, como ejercicio de clase, reclamando subtítulos en los programas de televisión. En solo una semana fue compartido más de 8.000 veces a través de Facebook. Fue una demostración, dice, de lo que las personas sordas son capaces de hacer con el objetivo de que «la sociedad tome conciencia» de su existencia.

Es que dentro del sistema educativo la discapacidad auditiva es la más relegada. Solo el 0,3% estudia en la universidad. Y de las más de 320 personas que ingresaron desde 1996 a liceos públicos accesibles para sordos, solo 24 se graduaron. Sin darnos cuenta, dicen los especialistas, buena parte de la información que recibimos en la vida entra por el oído.

«Cuando ingresé a facultad no sabía que había reglas en los exámenes, nadie me lo había explicado», cuenta y admite que con el tiempo se fue acostumbrando. A la hora de escribir Rodrigo tiene cierta tolerancia. «Los profesores me han dicho que no hay problema alguno si algo no está bien escrito mientras se entienda el concepto», señala después de haber terminado su jornada laboral en Aula Virtual de UTE.

Cara a cara conversa con mayor facilidad y cuando un docente no le entiende opta por redactar en la computadora. Por eso, los trabajos prácticos le resultan más accesibles. Para las materias teóricas necesita de un intérprete cuesta unos 200 pesos la hora, en universidades públicas y UTU lo financia el Estado, salvo que intente leer los labios, algo realmente muy difícil. Los profesores, dice, no están acostumbrados a hablar siempre para el mismo lugar o bien se dan vuelta para anotar en el pizarrón y él se pierde la mitad del discurso. Para su suerte no se perdió el derecho de estudiar lo que realmente le gusta.

EL PARTIDO. Matías Verdugo (24) quería ser jugador de fútbol, pero está cursando el tercer año en Ingeniería en Sistemas. En 2004 le apareció un dolor en su espalda y no tuvo más remedio que operarse. Lo que jamás imaginó es que la intervención saldría mal y, desde entonces, no tendría control del tronco y las piernas.

Aun así su vida de estudiante parece la de un partido. Debe planificar cómo transportarse con, al menos, 24 horas de anticipación. Tiene que enfrentar a un rival que, en su caso, son los ascensores viejos que a veces se trancan, los estudiantes que encadenan sus bicicletas en la rampa de acceso a la facultad y los funcionarios que, sin tener matrícula para lisiados, estacionan sus autos en los espacios reservados.

Y además se prepara para, con su silla de ruedas, jugar en todas las canchas. Es que a veces tiene que trasladarse desde el edificio central de Julio Herrera y Reissig hasta el anexo. Es un trayecto que no supera una cuadra pero tiene, en el camino, piedras y una pronunciada pendiente. En bajada todo le es más fácil, aunque más de una vez volcó. En subida, el desafío le es sencillamente «imposible».

Pero Matías, que sale adelante a pesar de todo, cuenta con la ayuda de sus compañeros. Si lo ven en dificultades, lo asisten. Con algunos forjó una amistad, sale a bailar, estudia y comparte el infaltable mate. La única complicación, admite, es juntarse a preparar un trabajo a deshora o fuera de la facultad.

Suele movilizarse con la camioneta de la Comisión Nacional Honoraria de la Discapacidad. Cada tramo del viaje le cuesta 90 pesos. Y, aunque recibe una beca por méritos académicos debe salvar 60% de las materias que cursa, no le alcanza el dinero y debe administrarse bien los tiempos.Es que el vehículo funciona solo de lunes a viernes hasta las ocho de la noche. Además, lo debe solicitar el día anterior. Para colmo, por la puerta de la universidad no pasa ningún ómnibus accesible y la última opción que tiene, la del auto propio, es una utopía porque desde enero está a la espera de la autorización para la exoneración de impuestos que exige la ley. Y hasta ahora no obtuvo respuesta.

El 1,9% de los estudiantes de la Universidad de la República tiene discapacidad motriz severa. Los principales problemas para esta población, explica el psicólogo Sergio Meresman, son las condiciones edilicias (que están cambiando, aclara) y la falta de educación que permita modificar ciertas actitudes involuntarias.

«No estoy reclamando preferencia, estoy pidiendo igualdad», dice Matías en referencia a que no ha tenido obstáculo alguno para conversar con el decano, pedir el cambio de salón para algún parcial o la tolerancia de llegar tarde porque el ascensor estaba fuera de funcionamiento. Y, de apoco, los cambios aparecen. De hecho, ya ha tenido ofertas laborales por ahora solo da clases particulares de Matemática y Física y estima que, para cuando se reciba, esos lugares en lo que trabajará serán accesibles. Eso sí sería un golazo.

COMUNICACIÓN. Cuando Gonzalo Scrigna (24) decidió estudiar periodismo deportivo, por sugerencia de su psiquiatría, el primer sorprendido fue su entorno. No es que no haya mostrado conocimientos e interés por los deportes. Al contrario, tiene una facilidad para recordar fechas de campeonatos y hechos épicos, además de poder analizar el juego, que bien puede ser envidia de los grandes comentaristas. Pero tiene Síndrome de Asperger, una condición que forma parte del espectro autista y que, justamente, se manifiesta con problemas para la comunicación e interacción social.

En Uruguay no hay cifras exactas sobre cuántas personas presenta esta problemática. En el mundo se estima que el 1% de las personas tiene autismo y, de ellos, uno de cada cinco puede tener Asperger. Gonzalo no reniega su condición y aunque no pasea por los pasillos del Instituto Profesional de Enseñanza Periodística (IPEP) con un cartel que explique su síndrome, tampoco lo oculta.

Para quien no lo conoce es difícil que a simple vista note alguna diferencia con el resto, salvo porque habla en forma particulary demasiado rápido y, rara vez, conversa solo o dibuja con el dedo en el aire. Desde los 17 años es consciente de lo que tiene, su madre se lo explicó, aunque recuerda que acude a equipos de salud mental desde los 5 años, cuando fue diagnosticado. Fue justamente su madre, Isabel, a quien le llamó la atención la dificultad de su hijo para jugar a las escondidas o hacer una cola en el tobogán para esperar su turno.

No es su caso, pero el diagnóstico tardío es una de las principales explicaciones del bajo porcentaje de personas con autismo que alcanzan la universidad, explica su psicólogo Fabricio Gómez, quien acompañó a Gonzalo en los primeros días de adaptación al curso el año pasado.

«Necesitaba esa seguridad y saber que si me ponía muy nervioso ante algo nuevo podía recurrir a su ayuda», cuenta Gonzalo con la soltura de un profesional de la comunicación. Luego pasó a desenvolverse completamente solo, va caminando desde su trabajo en una tienda de artículos para turistas y regresa a casa en ómnibus.

A diferencia del liceo, donde tenía tolerancia en los tiempos de las pruebas y el nivel de algunos trabajos, en el IPEP es uno más. Así se lo hacen saber sus profesores y sus compañeros de clase, con los que tiene buena relación. Y, por ahora, su desempeño es «excelente», comenta el psicólogo.

Distinta fue su realidad en los talleres Don Bosco, cuando intentó estudiar informática ni bien egresó del colegio Clara Jackson. «Los compañeros me hacían la vida imposible, me incitaban a que probara el cigarrillo, era horrible», recuerda.

A las personas con Asperger muchas veces se las tilda de genios. Gonzalo no cree que su intelecto sea superior a la media. Sí reconoce que cuando algo lo apasiona se vuelca de lleno a la tarea. Es lo que le sucede con el periodismo deportivo y con las prácticas del programa Básquetbol para Todos en el Defensor Sporting donde juega con la ventaja de medir 1,95 metros.

¿Cuál será su futuro? La salida laboral no es algo que, a priori, le preocupe. Prefiere no cargarse esa mochila y focalizar todo el esfuerzo en el estudio. Eso sí: tiene pendiente entrevistar a Antonio Pacheco. Y, a la vista de su actitud, lo conseguirá.

Un camino que se hace cuesta arriba

Más del 16% de los uruguayos tiene una discapacidad permanente para ver, oír o caminar. Sin embargo, en el ámbito educativo «las personas con discapacidad quedan en el camino, mucho antes de la universidad», dice el psicólogo Sergio Meresman, coordinador del Instituto Interamericano sobre Discapacidad y Desarrollo Inclusivo. «De hecho la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) no tiene previsto un área en Secundaria que se dedique a ellos». Tal es así que solo 1,3% del alumnado de la Universidad de la República manifiesta tener algún tipo de discapacidad. ¿Por qué algunos llegan y otros no? «El apoyo familiar es decisivo», señala el psicólogo. «Todo depende del horizonte que los padres se animan a ponerle a sus hijos». Lo otro es la resiliencia de las propias personas con discapacidad, que es la capacidad de sobreponerse a las adversidades. Y, por último, influye el sistema. «La propuesta universitaria», dice Meresman, «no es personalizada y no se adapta bien a cada persona concreta».

Pablo Pineda

El primer egresado con down

Atiende a Domingo desde su casa de veraneo en Alicante, aunque el resto del año vive en Málaga, España. Habla con acento cerrado, mezcla del castellano con el valenciano, el italiano que maneja con soltura, el inglés y su propia condición. Es la primera persona europea con Síndrome de Down que terminó la universidad. Pablo Pineda (40) se graduó de magisterio y psicopedagogía, publicó un libro, filmó una película por la que ganó el premio de San Sebastián a Mejor Actor y una calle de su ciudad lleva su nombre. No en vano lo que más llama la atención de su voz es la alegría, más allá de las adversidades.

«Los chicos con Síndrome de Down son personas torpes, repetitivas y que les gusta la música». Esa era la definición en el libro de Psicología Evolutiva que estudió en la universidad. Años antes, en el liceo, «mongólico» y «retardado» era lo más suave que le decían sus compañeros, en referencia a su discapacidad intelectual fruto de una alteración genética, por la duplicación del cromosoma 21. Pero «flaco favor les hacía si dejaba caer la toalla», reflexiona sobre su capacidad de resiliencia. «Soy una persona muy decidida y si bien el Síndrome de Down hace que haya dificultades en el mecanismo de aprendizaje, lo único que necesitamos es más tiempo y tranquilidad para asimilar los conceptos», dice.

Tal es así que todos los días se establecía una rutina los trabajos sistemáticos «le sientan bien», cuenta y pasaba unas cinco horas leyendo los materiales; siempre en voz alta y con lapicera en mano. Esa fue su estrategia para lograr lo que anhelaba desde pequeño: «Volcar los conocimientos a los niños».

Antes de pensar en ser maestro una idea que meditó junto al catedrático de la universidad pública de Málaga donde se graduó quiso ser abogado e incluso periodista. Y siempre con el objetivo claro de ayudar a la inclusión de personas con discapacidad. De hecho, hoy es consultor de la Fundación Adecco para la inserción laboral de personas con dificultades físicas o intelectuales. Y concluye desde el otro lado del Atlántico con un mensaje para quienes están en la situación que él ya vivió: «Luchen, no se acomplejen nunca, no se comparen con nadie y sigan pidiendo a gritos los derechos que tienen como ciudadanos».

El paradigmático caso de Temple Grandin y los animales

Hasta los cuatro años Temple Grandin (67) no habló. Le diagnosticaron daño cerebral y bastante tiempo después notaron que era autista. Rechazaba los abrazos hasta que descubrió una máquina que tenía su tío ganadero para calmar a los animales. Eran dos palancas metálicas que generaban presión a ambos lados de las vacas y las desestresaban. Ese fue el comienzo para idear su carrera. Es doctorada en Ciencia Animal y profesora en la Universidad de Colorado, Estados Unidos. Así relata su experiencia a Domingo:

¿Cómo logró ingresar a la universidad?

Se hizo un arreglo con el decano para dejarme ingresar bajo la condición de que obtendría buenas calificaciones. Luego de entrar, tuve que probarme a mí misma y obtuve buenas notas.

¿Recibió ayuda de sus profesores y compañeros de clase?

Los profesores me han ayudado mucho. El amable profesor de matemática Mr. Dion me tutoreó y colaboraba fuera de hora. Recibí su ayuda antes de que tuviera alguna mala calificación. Algunos estudiantes no me han ayudado tanto, sin embargo hice buenos amigos.

¿Fue acompañada?

No, fui sola. Me permitieron quedarme a dormir en un dormitorio doble, en vez de estar con tres chicas en una habitación, como era lo normal. De lo contrario me hubiera sido imposible estudiar y descansar.

¿El autismo colaboró en su estudio?

Me ayudó en mi trabajo con animales, porque ellos son pensadores visuales, como yo (crean secuencias de imágenes). Pero siendo una mujer en un ambiente de hombres en la década del ´70 fue difícil. Trabajé duro para demostrarles a las personas que era inteligente y no estúpida.

Del braille a la magia de la pc

Cada vez que Mauro Sghezzi quiere acceder al texto de uno de los teóricos de la Psicología, baja el material de Internet o digitaliza el libro y lo escucha con un programa informático. Así ahorra tiempo y dinero frente al braille.

http://www.elpais.com.uy/domingo/universidad-discapacidad.html

Secundaria deja «conformes» a solo 3 de 10 universitarios


INFORME: EL 36% ESTÁ A GUSTO CON FORMACIÓN RECIBIDA EN SU COLEGIO O LICEO

Siete de 10 jóvenes universitarios son mujeres, 1 de cada 4 elige la carrera por descarte, 6 de 10 viven con familiares, más de la mitad llega desde el interior y solo 3 de 10 están conformes con la formación recibida.

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Más de la mitad de los universitarios (52%) llega a su facultad procedente del interior.

Los resultados surgen de una encuesta online realizada por el grupo Radar y la revista Pro Universitarios a estudiantes universitarios de grado, posgrado y carrera técnicas, tanto de la Universidad de la República como de las universidades privadas de Uruguay.

Los participantes fueron contactados a través de Facebook, Twitter y páginas web. En total participaron 3.034 personas, entrevistadas entre el 17 de julio y el 15 de agosto de 2014.

El trabajo obtuvo que casi uno de cada cuatro universitarios elige la carrera «por descarte». Al ser consultados sobre las razones de la elección, 22% dijo hacerlo por esta razón. Además, solo 36% de todos los entrevistados dijo encontrarse conforme con la formación recibida a nivel de secundaria.

Nivel económico.

La encuesta analizó el perfil de los estudiantes, su formación complementaria, trabajo, capacidad emprendedora, acceso y relación con los medios, salud y hábitos sociales, transporte, religión, opinión sobre temas de interés y viajes fuera del país.

En cuanto al nivel socioeconómico, la población universitaria tiene un nivel de vida superior al promedio. La cantidad de personas que pertenecen a los estratos más bajos representa 11% de los universitarios; a nivel nacional este grupo alcanza el 31% de los habitantes.

Por otra parte, al analizar el nivel económico de los que concurren a universidades privadas, el trabajo de Radar obtuvo que las personas en niveles altos no son más del 56%; el 44% pertenece a los niveles medio alto, medio, medio bajo y bajo. El trabajo no analizó diferencias entre las cuatro universidades privadas.

Además, más de la mitad llega a la universidad desde el interior del país. El 52% de los universitarios cursó enseñanza secundaria en un liceo público o privado que no pertenecía a Montevideo. Entre ellos, la mayoría (45%) fue a una institución gratuita y 7% a una paga.

En cuanto a con quienes viven, cada 10 jóvenes universitarios, entre 6 y 7 comparten su vivienda con sus padres u otro familiar (63% del total): 12% con su pareja, 9% reside en casas estudiantiles, 8% vive con amigos y 6% solo.

La encuesta revela profundas diferencias de género entre los universitarios: de cada 10 estudiantes, siete son mujeres y tres son hombres. La edad promedio es de 22 años y difiere levemente entre la Udelar y las privadas (seis meses mayores en estas últimas).

En las instituciones no gratuitas también se observa una población más alta de personas con edades que superan los 25 años; son 17% de los estudiantes de las privadas, mientras en la pública son el 14%.

Fuente: Grupo Radar

 

Solo seis departamentos del interior ofrecen carreras universitarias


ESTUDIO

Los departamentos del centro y algunos del oeste del país sólo ofrecen un curso de enseñanza superior, Lavalleja no tiene ninguno. Tampoco hay carreras universitarias

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La región centro del país, –Florida, Flores, Durazno, Canelones y San José– constituye “la zona más crítica del Uruguay en cuanto a oportunidades de formación de nivel terciario”. En ella no existen ofertas de estudios universitarios de grado y escasea la oferta terciaria no universitaria. Una situación similar enfrenta la región litoral oeste (Colonia, Soriano y Río Negro).

Los departamentos de Durazno, Flores, Florida y San José ofrecen un único curso de nivel terciario (en áreas ganadera o de seguridad industrial); al igual que en la zona oeste sucede en Fray Bentos. Estos datos se desprenden del estudio “Relevamiento de capacidades relativas a la formación terciaria en áreas claves para el desarrollo de la Universidad Tecnológica del Uruguay (UTEC)”, con fecha junio 2013, al que accedió El Observador.

La consultoría realizada por las economistas Belén Baptista y Victoria Tenenbaum fue encomendada por las autoridades de la UTEC con el objetivo de conocer el panorama educativo terciario del interior, previo a decidir dónde instalar su primera sede, que finalmente se ubicará en Fray Bentos (región litoral oeste), en el edificio del ex frigorífico Anglo. La clave para elegir la ubicación fue la demanda de la zona, que incluye las áreas de lechería, agroindustria, medioambiente, energías renovables, transporte y logística.

Las autoridades ya definieron también que la segunda sede de la UTEC se ubicará en Durazno (región centro), aunque todavía no especificaron el lugar dónde funcionará.
El estudio también afirma que solamente seis departamento del interior del país cuentan con oferta de carreras universitarias de grado. Ellos son: Salto, Paysandú, Rivera, Tacuarembó, Maldonado y Rocha. En tanto, Lavalleja (región este) es el único departamento que no cuenta con siquiera un tipo de oferta universitaria o terciaria universitaria.

El informe destaca que la enseñanza terciaria y, particularmente la universitaria, “representan los espacios de formación peor distribuidos en el territorio nacional”.

Agrega, que más allá de Montevideo, el país “evidencia vacíos y debilidades importantes (…) en áreas definidas por el propio Estado como estratégicas para alcanzar el desarrollo nacional”. En este sentido, resalta la falta de formación en el área Logística y Transporte, Biotecnología y TIC’s.

Región noroeste primerea
De acuerdo con los resultados de la consultoría, en el interior del país existe una oferta de 60 carreras universitarias de grado, de las cuales las dos terceras partes son impartidas por la Universidad de la República (Udelar) , 17% por la Universidad Católica y 5% por el resto de las universidades e institutos universitarios privados.

La región noroeste (Artigas, Salto y Paysandú) es la que tiene mayor tradición en oferta de educación universitaria de grado. En esa zona se concentra el 60% de la oferta de carreras universitarias de grado existente en el interior del país. De ese 60%, las dos terceras partes su ubican en Salto.

En la zona la Udelar imparte formación desde hace más de cinco décadas. Hoy en día, lo hace en seis grandes áreas de conocimiento, entre ellas, Salud, Ciencias Sociales, Ciencias Naturales y Exactas.

Carreras para áreas estratégicas
El Plan Estatégico Nacional de Ciencia , Tecnología e Innovación (PENCTI) define como sectores prioritarios para el desarrollo del país, la producción agropecuaria y agroindustrial, el software y los servicios informáticos, medio ambiente y servicios ambientales, energía, turismo, logística y transporte y educación y desarrollo social. El informe señala que además de la falta de oferta de formación en logística y transporte, hay sectores como la energía que son “muy pobremente atendidos con la oferta de formación superior”. Lo mismo sucede con la producción agropecuaria y agroindustrial, que solo cinco departamentos ofrecen.

En la región noreste (Tacuarembó, Rivera y Cerro Largo) los primeros centros universitarios de la Udelar se instalaron durante la segunda mitad de la década de 1980. Sin embargo, actualmente solamente el Centro Universitario de Rivera ofrece cursos de grado, en el área Salud, Ciencias Naturales y Exactas y Ciencias Sociales. A diferencia de la zona noroeste, en esta no existe oferta universitaria privada.

Por su parte, la región este (Maldonado, Rocha, Lavalleja y Treinta y Tres) ha vivido un desarrollo de la oferta universitaria en los últimos años, sobre todo en Maldonado. La primera institución en instalarse en ese departamento fue la Universidad Católica. Luego se sumó el Instituto Universitario Francisco de Asís y el Instituto Universitario Claeh. Por último, lo hizo la Udelar en 2007, con la creación del Centro Universitario Regional Este.

Esta oferta lleva a que hoy Maldonado concentre el 34% de la oferta total de carreras universitarias de grado en el interior del país. El 80% de las mismas son ofrecidas por instituciones privadas.

Técnica y no universitaria
En lo que refiere a la enseñanza técnica y tecnológica, el interior del país cuenta con 36 carreras terciarias técnicas, de las cuales 31 son impartidas por la Udelar.

Si se analiza por zonas, la región noroeste vuelve a liderar, acumulando el 46% de la oferta (17 carreras). Paysandú concentra diez tecnicaturas, Salto seis y Artigas una.

En tanto, la región noreste concentra el 27% de la oferta (10 carreras) y región este, el 38% (con 13 tecnicaturas). En el este Maldonado lidera con diez ofertas.

Primera carrera
El 21 de abril comenzó a funcionar la primera carrera de la UTEC. La Licenciatura en Leche y Productos Lácteos se imparte provisoriamente en un salón del Liceo Daniel Armand Ugón, en Colonia Valdense. La carrera comenzó con 32 inscritos, la mayoría de ellos técnicos por la Escuela Superior de Lechería de Nueva Helvecia.

La propuesta de la enseñanza terciaria en el interior es similar a la tecnológica. En este rubro, el interior también cuenta con 36 cursos o carreras, de las cuales el 95% son ofertas de UTU.

Otra particularidad es que su distribución es más informe que la de la enseñanza universitaria, o sea se imparten cursos de UTU en el 94% de los departamentos del interior del país.

Más allá de esto, el estudio establece que la cobertura de educación universitaria en el interior del país ha mejorado en los últimos años producto del proceso de descentralización de la Udelar, iniciado en 2007, con la creación de nuevos centros y carreras.

El 23% se traslada para estudiar

El informe analiza también las desigualdades educativas a nivel terciario entre las distintas regiones del país. Señala que mientras el 25% de la población de Montevideo culmina estudios universitarios, en el interior, solo lo hace el 8%. De esta manera, Montevideo se ubica como el departamento con mayor cantidad de personas que finalizan la universidad. Lo sigue Canelones y Salto. En tanto, las regiones con menos cantidad de personas con títulos universitarios (5%)  son el Centro, el Este y el Noreste.

Se agrega que del total de mayores de 25 años con nivel universitario, un 32% reside en el interior del país, mientras que un 68% lo hace en la capital. El informe también da cuenta de que el nivel socioeconómico del departamento es un factor determinante a la hora de decidir qué y dónde estudiar. “En parte, esto explica los niveles educativos alcanzados en cada región, lo que constituye un círculo vicioso”, manifiesta el documento.

Según el Censo de 2011, el 23% del total de jóvenes de 17 a 25 años en el interior del país se traslada a otro departamento a estudiar. De estos el 87% elige Montevideo. Los departamentos de dónde más emigran jóvenes son: Canelones (48%), San José (32%), Florida (28%) y Lavalleja (20%) (ver infografía).

Esto coincide con en análisis de la regiones, ya que estos cuatros departamentos señalados no tienen carreras universitarias, en el último caso, ni siquiera con curso de formación terciaria. La consultoría también subraya que solamente el 16% de los jóvenes del interior alcanzan nivel de bachillerato secundario o UTU. Por encima de este promedio se ubica: Colonia y Maldonado.

http://www.elobservador.com.uy/noticia/284530/solo-seis-departamentos-del-interior-ofrecen-carreras-universitarias/

Darán facilidades a universitarios para comprar tablets


universidad de la república

El Ministerio de Educación, el BROU, la Udelar y el Plan Ceibal implementarán la medida que beneficiará a estudiantes de hogares de bajos recursos.

tablets

Alrededor de 8.000 estudiantes de la Universidad de la República (Udelar) de hogares con ingresos socioeconómicos bajos podrán acceder a la compra de tablets de bajo costo.

El Ministerio de Educación y Cultura (MEC), Plan Ceibal, la Universidad de la República (UdelaR), el Banco República (BROU) y el Fondo de Solidaridad anunciarán facilidades para el acceso de estudiantes universitarios a las tablets digitales.

La iniciativa será presentada el próximo jueves, a la hora 15:00, en la sala de prensa de Torre Ejecutiva.

Estarán presentes el ministro de Educación, Ricardo Ehrlich, y el director de Educación del MEC, Luis Garibaldi. Asistirán, además, representantes del Plan Ceibal, Udelar, BROU y del Fondo de Solidaridad, informa la cartera de Estado.

http://www.elpais.com.uy/informacion/daran-facilidades-universitarios-comprar-tablets.html

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