Archive for 21 de abril de 2014

UTU se une a un privado para llegar a jóvenes del medio rural


 EDUCACIÓN

Lanzan en Rivera el primer curso de formación profesional básica en alternancia

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El próximo lunes 28 de abril el Consejo de Formación Técnico Profesional (UTU) en convenio con la asociación civil La Siembra lanzaráen el departamento de Rivera el primer curso de Formación Profesional Básica en alternancia, destinado a jóvenes mayores de 15 años que han desertado del sistema educativo.

El curso se dictará en el Centro de Formación Rural La Siembra y tiene como objetivo reinsertar a los jóvenes del medio rural para que continúen sus estudios.

Juan María Cabrera, coordinador del centro de formación, manifestó a El Observador que el curso estará compuesto por seis módulos. Los alumnos asistirán a un taller de formación profesional y  a los cursos de las materias tradicionales.

En el convenio la asociación civil se compromete a prestar las instalaciones y la UTU será la encargada de contratar a los profesores.

La originalidad del curso que se dictará reside en el sistema de alternancia, metodología por la cual los alumnos varían su formación entre períodos socio profesionales familiares (en su medio de vida) y la estadía en el centro. El objetivo es que ambas modalidades se complementen para reforzar la acción formativa, explicó Cabrera. En el caso de La Siembra, los estudiantes  residirán en el centro una semana y luego permanecerán en sus hogares dos semanas, aplicando en su medio de vida los conocimientos adquiridos.

El coordinador de La Siembra señaló que la alternancia es el “sistema de formación más adecuado a las características del medio rural. Se trata de una formación realista apoyada en la vida y centrada en la persona”.

El objetivo del sistema de alternancia es “mejorar la calidad de vida del joven y de su familia y evitar la emigración hacia la ciudad o centros poblados, afincando al joven en su medio”, aseguró.

La Siembra se encuentra ubicada en la localidad Cerro Pelado (Rivera) en el kilómetro 73 de la ruta 27. Cabrera manifestó que se trata de una zona rural alejada de grandes centros urbanos, donde la oferta educativa es muy escasa.  En este sentido destacó el valor de la propuesta y del convenio con UTU.

El Observador intentó, sin éxito, comunicarse con autoridades de UTU.

Inscripciones

Si bien el centro tiene capacidad para 20 alumnos, el número de interesados ha sido superior. El coordinador de La Siembra adelantó que el ritmo de inscripciones ha superado las expectativas.

Los cursos de Formación Profesional Básica de UTU equivalen a los cursos de Ciclo Básico de Secundaria, con la diferencia de que en estos los alumnos adquieren también formación en alguna rama profesional específica, que luego facilita su ingreso en el mercado laboral.

Según el Anuario estadístico del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) correspondiente a 2012, la matrícula de estos cursos de UTU ha crecido considerablemente en los últimos dos años. Mientras que en 2010 contaba con 20.241 estudiantes, en 2012 el número de alumnos ascendió a 26.241, lo que implica un crecimiento de casi 30%.

La Siembra, una apuesta a la formación

El centro de formación rural La Siembra surgió en 2007 por iniciativa de personas y profesionales de la localidades de Cerro Pelado y Tres Puentes (Rivera) interesadas en la educación de los jóvenes de la zona. Anualmente cuenta con 50 alumnos.

La propuesta encontró enseguida el apoyo de productores y empresas rurales de la zona, así como de fundaciones, como Beisso – Fleurquin.

Desde los comienzos la metodología de alternancia fue el sistema utilizado en el centro para la formación de los jóvenes, manifestó Cabrera.

El nuevo local, inaugurado el 5 de marzo pasado, se logró gracias a la donación de un terreno de 2 hectáreas por parte de la diócesis de Tacuarembó y de la suma de 98 mil dólares por parte de la embajada de Japón. El coordinador de La Siembra manifestó que estos aportes fueron fundamentales, porque hasta el año pasado, el centro funcionaba en un local muy precario.

La Siembra ofrece distintos cursos destinados a jóvenes y adultos del medio rural, como por ejemplo: tejido en lana rústica, informática, huerta orgánica, administración rural, cocina criolla, administración del hogar, etcétera.

http://www.elobservador.com.uy

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Unasev admite que está limitada en tarea de controlar el tránsito


ACCIDENTES

Convocarán a un encuentro sobre “cómo mejorar observación de normas” de tránsito

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La Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev) tiene la limitación de ser una oficina que depende de Presidencia  y cuya tarea consiste en mejorar las normas y diseñar estrategias.

La observación de esas normas y el control del tránsito no depende de esa oficina. Por tanto, su personal se siente atado de manos para actuar y evitar las 16 muertes cada 100.000 personas por siniestros en la vía pública.

“Todo lo que estamos haciendo –que está bien y hay que hacerlo– tiene un punto muy flaco en la observación y el control de las normas”, dijo a El Observador el presidente de la Unasev, Gerardo Barrios. “Lo dice Naciones Unidas, no lo decimos nosotros. Si queremos mejorar la cifra de lesionados y fallecidos por el tránsito, hay que mejorar las políticas de autoridad”.

Nueve personas fallecieron en siniestros en rutas durante esta Semana Santa. A raíz de eso, el jerarca admitió que la situación se puede catalogar como de “alerta nacional”.

Ya antes de conocer esa cifra, el equipo de Unasev planeaba convocar este año a un encuentro entre los gobiernos departamentales, los cuerpos inspectivos y el Ministerio del Interior para trabajar sobre “politicas de autoridad y cómo mejorar la observación de las normas”. “Se requiere de la participación activa de todos los actores”, argumentó.

Barrios aseguró que desde que existe la unidad (2009) se ha avanzado en materia de regulación (“teníamos un atraso de 20 o 30 años en la normativa”, opinó) y en llegar a “consensos”. También se introdujo la formación en seguridad vial en Primaria. Pero más allá de eso, asegura que hay que “actuar”.

Una de las apuestas más fuertes en ese sentido está orientada a un proyecto de ley que está a estudio en el Parlamento. Consiste en crear una Policía Nacional de Tránsito para superar las fallas de coordinación que hoy existen entre los cuerpos inspectivos de los gobiernos departamentales (a los que les compete la vigilancia de las calles en las ciudades) y la Policía Caminera del Ministerio del Interior (que monitorea el tránsito en las rutas nacionales).

“Desde el viernes a las 21 horas hasta el lunes a las 8 de la mañana hay que controlar. Y los inspectores a veces se ven inhibidos de actuar en ese horario, justo cuando el alcohol se dispara. Ahí tiene que estar la Policía Nacional. (Para) controlar sin jurisdicciones. Hay que actuar a nivel nacional barriendo esas fronteras”, consideró Barrios.

De todas formas, el titular de Unasev advirtió que reducir las muertes en el tránsito son “procesos que llevan hasta 20 años”. Puso el ejemplo de España, que en 2008 tenía 10 fallecidos cada 100.000 personas cuando el promedio en Europa era de 5.

Luego de distintas acciones (“hay varios componentes y todos influyen”), ahora ostenta cifras similares a los países vecinos.

Cifras

16
Personas mueren en siniestros de tránsito cada 100.000 habitantes en Uruguay.


Es el promedio de muertes cada 100.000 habitantes por la misma causa en Europa.

567
Personas murieron en accidentes de tránsito en 2013 en Uruguay. En 2012 fueron 510 y en 2011 fallecieron 572.

30.000 
Resultaron heridos en accidentes en 2013.

43%
De los siniestros de tránsito de 2013 ocurrió entre la hora 21 de los viernes y las 8 de los lunes. Florida fue el departamento con más fallecidos.

http://www.elobservador.com.uy

En Semana Santa hubo 15 fallecidos en accidentes viales


EN TODO EL PAÍS

Esa cifra incluye a las personas que murieron en siniestros viales en rutas nacionales (10) y en ciudades (5), según datos de la Unidad Nacional de Seguridad Vial.

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En Semana de Santa, entre el sábado 12 de abril y el domingo 20 de abril, fallecieron 15 personas en un total de 494 siniestros ocurridos en rutas nacionales y en las ciudades del país, según informó hoy la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev).

Datos relevados por el Sistema de Información Nacional de Tránsito (Sinatrán), que gestiona la Unidad Nacional de Seguridad Vial, arroja los siguientes resultados para la Semana Santa 2014.

En los 9 días se registraron en todo el país 494 siniestros con lesionados. Como consecuencia de estos siniestros resultaron lesionadas 655 personas, de las cuales 541 fueron heridos leves, 99 heridos graves y 15 fallecieron.

Del total de fallecidos, cinco se registraron en siniestros ocurridos en ciudades y caminos departamentales y los restantes 10 en siniestros en rutas nacionales.

En el caso de las ciudades se redujo la cantidad de fallecidos, que pasó de 7 en 2013 a 5 en este año.

En las rutas nacionales, se mantuvo la misma cantidad de fallecidos que el año anterior, según la Unasev; sin embargo Caminera indicó a El País que el año pasado fueron ocho personas que fallecieron en la Semana de Turismo, lo mismo informa la nota publicada por El País luego de la Semana Santa anterior; es decir que la cifra de muertos en accidentes este año es superior a 2013.

En comparación con el mismo período de los años anteriores, las cifras son muy similares, con una leve reducción en la cantidad total de siniestros; en cuanto a los lesionados, se constata una reducción de heridos, indicia la Unasev.

http://www.elpais.com.uy

Jornada laboral de seis horas: el experimento de un intendente sueco


PRODUCTIVIDAD

El intendente de Gotemburgo decidió rebajar dos horas la jornada laboral de los empleados públicos convencido que más horas de trabajo atentan contra la productividad.

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¿Trabajar seis horas por día y cobrar como si fueran ocho o nueve? ¿Quién podría decir que no? El atractivo proyecto responde a la iniciativa del intendente de la ciudad sueca de Gotemburgo, para crear puestos de trabajo y aumentar la productividad de sus empleados.

Mats Philem, responsable de esa urbe de 500.000 habitantes, la segunda entre las más grandes de Suecia, propuso a comienzos de abril a su consejo municipal reducir el tiempo de trabajo a la mitad de sus empleados durante un año. En ese período, la otra mitad continuará trabajando con el mismo horario; todos recibirán el mismo salario.

«Al término de la experiencia, compararemos ambos grupos. Esperamos constatar menos ausencias por enfermedad entre quienes trabajaron menos y que los asalariados se sientan mejor mental y físicamente», explicó Philem.

Convencido de que la productividad es menor cuando las jornadas laborales son más largas, el intendente del Partido de Izquierda espera también aumentar la eficiencia de su administración.

Su experimento convirtió a Gotemburgo en un laboratorio que, desde comienzo de mes, está bajo la lupa y es tema de conversación de las grandes empresas multinacionales y de otros gobiernos.

Philem se apoya en numerosos estudios que demuestran, en efecto, que una jornada de trabajo más corta influye positivamente en la productividad. Basándose en cifras publicadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el instituto Policy Mic confirma: «Mientras más se trabaja, menor es la productividad».

Actualmente, los suecos trabajan un promedio de 36,5 horas por semana. Suecia está entre los países de la OCDE que tienen las semanas de trabajo más cortas. En Francia, que hace 14 años adoptó un régimen similar, el horario semanal oficial es de 35 horas, pero los franceses trabajan un promedio de 38 horas. El resultado no es el mismo cuando se comparan ambos países en términos anualizados. Allí, los franceses trabajan menos que los suecos: 1482 horas por año contra 1636.

No obstante, Francia mantiene una competitividad superior a la sueca y a muchos otros países. Los turcos, por ejemplo, se acercan a las 49 horas semanales, pero en términos de competitividad están muy lejos de Francia, de Noruega (33,9 horas) o Luxemburgo (37 horas).

En todo caso, todos los estudios demuestran que Francia es el país donde menos se trabaja en el mundo. Según el sitio económico Business Insider, los franceses se ubican justo delante de Alemania, Luxemburgo y Bélgica. Un gráfico demuestra que los países que más trabajan son Corea del Sur, México y Chile, mientras que Estados Unidos se encuentra en el promedio de los miembros de la OCDE.

Ese récord francés no se debe únicamente al tiempo laboral semanal, también tiene en cuenta la edad de la jubilación. Hace 14 años, el gobierno socialista dirigido por el premier Lionel Jospin instauró en Francia la semana de 35 horas para crear puestos de trabajo. Desde entonces, una avalancha de críticas se abate sobre esa medida, acusada de haber derrumbado la competitividad de las empresas y la performance económica del país. Las cifras, sin embargo, parecen desmentirlo.

Excluyendo del análisis la gran crisis financiera que golpeó a Europa a partir de 2007, un informe del Departamento de Análisis y Previsión del Observatorio Francés de Coyunturas Económicas estima que la actividad en el sector privado francés experimentó un pico de crecimiento de 2,9% de promedio anual en el período de aplicación de la ley. «Entre cinco de los mejores años que conoció el sector privado en los últimos 30 años, tres se sitúan durante el período 1998-2002 -según un criterio de crecimiento económico- y cuatro si se retiene el de creación de puestos de trabajo», anota el estudio.

Para el organismo, tras la aplicación de las 35 horas, «los resultados franceses fueron mejores que los registrados en el resto de la eurozona, sobre todo comparados a Alemania e Italia. Durante el decenio 1998-2007, el crecimiento fue superior en un punto al de Italia y en 0,8 puntos al de Alemania», afirma.

Francia no fue el único país que decidió reducir el tiempo semanal de trabajo. Finlandia hizo la experiencia entre junio de 1996 y diciembre de 1998. Por la grave recesión, 20 municipalidades participaron en el proyecto «6 + 6». Los empleados trabajaban seis horas, reemplazándose unos a otros. «La mayoría de los participantes afirmaban sentirse menos cansados y menos agotados emocionalmente al término de la jornada», anotaba el instituto Dollars and Sense, en 2001.

Los empleadores, sin embargo, decidieron poner fin a la experiencia, pues consideraron que el aumento de productividad, eficiencia y disponibilidad de los servicios no eran suficientes como para absorber los mayores costos del trabajo.

Dejar a la gente trabajar en la forma que desee «sólo puede aumentar la productividad», afirma Dharmesh Sha, cofundador y director técnico de la firma Hubspot. A su juicio, ese sistema permite a los empleados hacer su trabajo en el mejor momento para ellos y no en horarios convencionales. «Pero, sobre todo -afirma-, aumenta en forma exponencial el sentido de responsabilidad.»

http://www.elpais.com.uy

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