POLÍTICA ANTITABACO
Organizaciones de comerciantes alertan que con las nuevas restricciones a la venta de cigarrillos aumentará el contrabando
Organizaciones de comerciantes y cámaras denunciaron que las restricciones para impedir la publicidad del cigarrillo aumentaron el contrabando al punto que hoy la tercera marca más vendida en Uruguay proviene del comercio ilegal.
La denuncia se conoció mientras el gobierno avanza con un proyecto de ley que ya está a estudio del Parlamento y prohibe la publicidad de tabaco en los comercios con la intención de bajar el consumo y proteger la salud de la población.
Un estudio de la consultora Synovate (hoy Ipsos), del tercer trimestre del año pasado, mostró que el consumo de cigarrillos continúa en aumento con mayor prevalencia en zonas fronterizas. Según el relevamiento al que accedió El Observador, en los últimos tres años el mercado ilegal aumentó 6%.
En 2010, el contrabando de cigarrillos representaba el 25,3% del mercado total, mientras que según un nuevo estudio de marzo pasado, trepó a 31,2%.
Sin embargo, desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) se asegura que el contrabando está estable entre el 12% y 15% del mercado.
El proyecto de ley a estudio de la comisión de Salud Pública del Senado, propone prohibir la exhibición de cigarrillos en los comercios, donde sólo podrá haber una lista de los productos que se venden junto a una cartilla del MSP que advierta de los peligros del consumo y el humo del tabaco. También propone eliminar el patrocinio y la promoción.
Las advertencias sobre el aumento del contrabando y por tanto del consumo de productos sin control, fue realizada ayer en el Parlamento, por la Asociación de Quioscos y Sub Agentes de Quiniela; la Cámara Anti-Piratería y Contrabando; y la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay, entre otros.
Esas organizaciones entienden que el proyecto del gobierno promoverá aún más el contrabando que alcanzará a las ventas de las marcas legales como ya ocurrió con Canadá y Panamá, los únicos dos países de América Latina que instrumentaron un sistema similar.
Según datos del Ministerio de Salud Pública, casi una de cada cuatro personas fuma y entre los de menos recursos, los fumadores superan al 30%, cuando en los niveles más altos representan al 20%.
Empresarios consultados entienden que la celeridad en el análisis del proyecto obedece a que en pocos días, el 28 de abril, llegará al país la directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) Clarissa Etienne.
Uruguay, bajo el gobierno de Tabaré Vázquez impulsó una política antitabaco que comenzó prohibiendo fumar en espacios cerrados y luego aumentó el tamaño de las advertencias de riesgo sanitario que deben ir en las cajillas. Esa política derivó en que la tabacalera Philip Morris inició un juicio internacional al Estado.
En la exposición de motivos del proyecto a estudio del Parlamento, el Poder Ejecutivo informó que Uruguay aprobó el Convenio Marco para el Control del Tabaco, promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en su artículo 13 cada una de las partes reconoce expresamente que la prohibición de la publicidad, promoción y patrocinio “reduciría el consumo del tabaco”.
De los 168 países que suscribieron el convenio, nueve –Panamá, Australia, Islandia, Canadá, Noruega, Reino Unido, Finlandia, Seychelles e Islas Mauricio–, prohibieron la exhibición de los paquetes de cigarrillos en los puntos de venta.
Colombia optó por una solución intermedia y limitó la exhibición de cigarrillos sin prohibirla, por temor a que sucediera lo mismo que en Canadá y Panamá donde aumentó del contrabando.
En Canadá el contrabando representa el 34% del mercado, en tanto que Panamá llega al84% de las ventas totales, provocando pérdidas millonarias en materia de recaudación y un incremento del problema sanitario, señalaron las organizaciones.
Winston Abascal, director del Programa Nacional de Control de Tabaco del MSP, dijo ayer a El Observador que hay estudios extranjeros que aseguran que quitar la publicidad puede bajar hasta 8% el consumo de tabaco, sobre todo en jóvenes.
Impacto
El director de la Asociación de Kioscos, Claudio Orrego, dijo que el aumento del precio de los cigarrillos o la no exhibición en los comercios, causa un efecto negativo. “Lo único que ha hecho fue mover la masa de fumadores de un lugar a otro. De consumir en un comercio de proximidad, del barrio o en los establecimientos legales pasa a comprar donde su capacidad económica lo permite”, aseguró Orrego a radio El Espectador, el domingo 6.
Desde esa gremial, el director Jorge Núñez, comentó que le resulta “incomprensible que el gobierno impulse la legalización de la marihuana al mismo tiempo que medidas que tienden a ilegalizar el comercio de cigarrillos”.
La Cámara de Comercio también envió una nota al Senado, firmada por su gerente Claudio Piacenza, en la que afirmó que las restricciones que impone el gobierno, son “la oportunidad perfecta” para “las organizaciones criminales especializadas en la comercialización de productos de contrabando y falsificados, que pasan a competir de igual a igual con el mercado formal”.
La Cámara dijo entender que se debe regular la comercialización de productos como el tabaco, pero objetó que prohiba la comunicación con los consumidores en el punto de venta.
Por su parte, la Cámara Anti-Piratería, también envió una misiva a la comisión de Salud del Senado donde advirtió sobre los efectos negativos de las futuras prohibiciones.
La nota señaló que las restricciones propuestas “no traerán efectos sobre el consumo, sino que, al igual que sucede con la marihuana y otras drogas, alentará el crecimiento de un mercado paralelo, controlado por grupos criminales que venderán productos de pésima calidad provocando un daño infinitamente mayor a los productos originales que cumplen con la ley”, planteó esa cámara.
Comercio ilegal está estable según el MSP
Para el gobierno el contrabando de cigarrillos está “estable” desde hace varios años y capta entre 12% y 15% del mercado total, dijo ayer a El Observador Winston Abascal, director del Programa Nacional de Control de Tabaco del Ministerio de Salud Pública (MSP). El jerarca dijo que desde febrero de 2010 no se aumentan los impuestos al tabaco a pesar de lo cual las empresas subieron en algunas oportunidades el precio de los cigarillos a la población aumentando sus ganancias. Para Abascal, las medidas tomadas desde el Poder Ejecutivo ayudaron a bajar el consumo y con las nuevas restricciones se apunta a bajar más el consumo en la población joven.
Posted by Vos en Plural on 9 abril, 2014 at 12:26
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