El Poder Ejecutivo envió al Parlamento un proyecto de ley para proteger la salud humano y el ambiente de las emisiones de mercurio y otras sustancias residuales. Uno de los objetivos es eliminar los termómetros con este metal para el 2020.
La utilización del mercurio puede constituirlo en una neurotoxima que afecta los riñones y muchos sistemas corporales como los sistemas nervioso, cardiovascular, respiratorio, gastrointestinal, hematológico, inmunológico y reproductivo.
Para el 2020 se espera prohibir la producción y el intercambio comercial de algunos productos que contienen mercurio, como pilas, lámparas fluorescentes, algunos tipos de jabones y cosméticos, instrumental médico no electrónicos como termómetros y aparatos de medición de presión arterial.
En Uruguay las posibles fuentes de emisión son: incineradores de residuos, fundiciones de metales no ferrosos y cementeras. Además considera que se deberán concentrar los esfuerzos para implementar nuevos procesos de fabricación de cloro y soda con electrodos de mercurio.
Especifica los daños que puede ocasionar a la atmósfera y el aumento del riesgo para la especie humana en caso de afectar a las cadenas alimenticias, principalmente por dispersión en el agua y consumo de peces afectados.
La normativa también consagra exigencias que abarcan a la totalidad del ciclo del mercurio con las implicaciones para los sectores económicos, de la construcción, electricidad, minería, agricultura, pesca, amalgamas dentales, entre otras e incluye un artículo dedicado a mejorar aspectos de salud.
Más información en el proyecto de ley adjunto a este artículo en formato PDF.
Montevideo, Uruguay
UNoticias
Fuente Presidencia
VA